Las batallas científicas se libran no sin consecuencias para la vida cotidiana. El estatus que le han querido dar a los "sujetos homosexuales" es sólo un ejemplo, aunque este caso en particular sea el que más afecta mi vida y mi subjetividad. Tal vez sólo se trate de una desavenencia histórica o una curiosidad de museo, un giro copernicano de la sociedad liberal. Como sea, la historia me inquieta
El 22 de diciembre de 2009 se legaliza, en el D.F., el matrimonio y adopción para las parejas de personas del mismo sexo -yo no acuñé tal barroquismo, este es el nombre oficial manejado y publicitado por nuestros imparciales medios de comunicación. Ese mismo mes, se publica en la revista publicada por CONACYT, Ciencia y Desarrollo el artículo "Homosexualidad en el reino animal".
¡Homosexualidad en el reino animal! Tal vez sólo se trate del gancho de una revista que leen pocos, pero no se puede negar su relación con las batallas políticas que se librarían en el congreso capitalino.
En fin, me resulta imposible destacar todas las tesis del artículo, aquí unas de ellas:
· Existen una amplia diversidad de comportamientos homosexuales en los animales que van desde el cortejo a la "monta" (término prosaico hasta para un biólogo).
· Las uniones son duraderas "... es interesante destacar que entre leones y elefantes las uniones entre dos machos son más cercanas y de mayor duración que las heterosexuales" (notar la función de la palabra "interesante", en el párrafo)
· Los leones y las zarigüeyas maricas y lesbianas también se reproducen mediante diferentes estrategias parecidas a la adopción: "... puede haber donantes de huevos a parejas de machos homosexuales..."
A este panorama selvático viene muy adecuadamente una expresión de Paco Vidarte y Ricardo Llamas: "Para que un homosexual logre el respeto social y no se lo discrimine no tiene más remedio que convertirse en lince". El mismo Paco Vidarte señalaba que cada vez que se defienden los derechos de las "minorías sexuales" se hace de la misma manera que con los derechos de los animales.
Sin duda conformamos una fauna muy problemática. ¿Es necesario acaso que recuerde cómo en el siglo XIX se estableció desde las cátedras científicas el estatus antinatural de las relaciones sodomíticas? Todas las apologías de ese entonces defienden la "naturalidad" de los propios impulsos. "El uranismo es una anomalía de la naturaleza, un juego de la naturaleza como hay miles en la creación", dice Ulrichs en 1862.
¿No es sorprendente que después de tantos años los argumentos no hayan cambiado siquiera un poco? Si tienes derecho a vivir, es porque tus afectos son "naturales". No se legaliza el matrimonio gay sino por la criba de la ciencia, y no hay perspectiva ética que supere este tipo de argumentos.
Entonces la pregunta fundamental: ¿qué chingados pasa con nuestra puta sociedad mexicana mierdera? Para entender algo, otra frase de Vidarte que creo muy errada: "... ya nadie anda buscando esencias homosexuales en la medicina, la embriología..." No sé en España, tío, pero esto sí pasa, al menos en México y Estados Unidos (toda la bibliografía del artículo proviene de ese país), porque desde esta perspectiva científica, en "esencia", las "uniones del mismo sexo" son una estrategia evolutiva.
Habrá que revisar esa serie de conceptos que parecen tan evidentes en los discursos científicos. La operación epistemológica realizada la resumo en los siguientes puntos: a) la "importación", en primer lugar, de un modelo dualista del sexo, supuestamente extraído de la observación de los ecosistemas no-humanos (a esto se refieren cuando usan el término grandilocuente "medio natural") a los humanos; b) la importación de conceptos como homo y heterosexualidad como modelos explicativos a los ecosistemas no-humanos; c) naturalización de los modos de vida queer, por medio de la etiología comparada.
Primero habrá que deshacernos del gran fardo sistémico natura-cultura, que tan empachados tiene a los científicos. Esto ya lo ha intentado la teoría queer, pero el trabajo ha quedado inconcluso.
Y muchas gracias a los científicos que primero nos arrebataron nuestra plena humanidad, pero que ahora nos reintegran toda nuestra bestialidad... "natural".
BIBLIOGRAFÍA
Alcaraz, Guillermina. (2009) Homosexualidad en el reino animal. Ciencia y Desarrollo. Vol. 35. Diciembre 2009. pp.6-11.
Llamas, Ricardo y Vidarte, Francisco Javier (1999). Homografías [versión electrónica] Espasa Calpe.
Vidarte, Paco. (2007) Ética marica. Egales: Madrid.